La importancia de una factura negociable es que promueve y facilita el acceso a financiamiento a plazos menores o inmediato. Principalmente ayuda a las pequeñas o medianas empresas, para lograr capital de trabajo o liquidez.
Una factura negociable es similar al de una letra de cambio. Es decir, se puede descontar o enviar en cobranza. Para ello se utilizan las líneas de descuento, se califica al adquiriente, lo notifica y, en caso de no pago, se protesta.
De esta manera la empresa emisora o el que vende la factura, que es proveedora de un bien o servicio, puede financiar la venta al crédito descontando dicha factura negociable.